
Hay sitios increíbles, vistas auténticas, rincones bellos, esquinas mudas, árboles que hablan... en fin, todos conocemos lugares, que tan sólo por estar ahí, divisarlo por un instante... y el corazón explota... El buen poeta siempre llevaría consigo una libretilla para describir la fugacidad de ideas, descripciones, ilusiones... La fragancia de un sitio, un noche estrella o una luna arañada son pequeños elementos que arrancan a empujenes de la inspiración una pequeña lágrima del alma...
Dafne.
No hay comentarios:
Publicar un comentario